El concepto de vivienda de las”Tiny Houses”, impulsado en Estados Unidos y extendido en el mundo actualmente, va más allá de la arquitectura misma y propone una nueva forma de vivir, más sostenible y simple, sin dejar de lado las comodidades de un hogar tradicional.
Las microcasas o “tiny houses” tienen en general entre 10 y 37 mestros cuadrados. Surgieron en Estados Unidos como una forma de liberación del mercado hipotecario y deudas impagables de por vida para poder adquiirir un hogar y en el caso de lograrlo, vivir trabajando para no tener tiempo para ocupar mentros ociosos de espacios de una gran casa que no se utulizaban.
Estas pequeñas casitas, proponen un cambio radical de estilo de vida.
Este movimiento arquitectónico y social que aboga por vivir en casas pequeñas y sencillas, se extendió de Estados Unidos a Europa y paulatinamente va cobrando adeptos en Argentina y el resto de Latinoamérica.
Es que sus constructores las consideran no sólo una vivienda, sino también un modo de vida vinculado a la sostenibilidad sin perder las comodidades de un hogar tradicional, existiendo incluso algunas minicasas de lujo.
¿Cuáles son los motivos principales para optar por una tiny house? Vivir una vida menos atada al consumo, más minimalista y respetuosa con el medio ambiente y los tiempos de ocio personales.
Pequeñas y eficientes
¿Cómo son las tiny houses? En general se construyen a partir de un container o un tráiler de chapa porque muchas están estacionadas sobre el lote y se pueden mover con una grúa o un vehículo fuerte, pero también las hay de madera o de estructura fija. En promedio, construir una en Estados Unidos (en general están hechas por sus propios dueños) cuesta unos 23 mil dólares más el equipamiento eléctrico (los paneles solares son muy populares en estas casas) y el sistema de calefacción y agua corriente, precio muy conveniente si se estima sobre los 285.000 dólares que cuesta una casa promedio en esos pagos. En nuestro país podemos hablar de 600.000 a 800.000 pesos para la construcción de una microcasa.
Las tiny houses están pensadas para ser súper eficientes en términos de gasto de energía, por lo que suelen generar su propia electricidad o gran parte de ella, tener un área de compost de residuos y huerta orgánica para producir alimentos.
La simplificación de la vida diaria, la autosuficiencia y el respeto por el medio ambiente son condiciones fundamentales para quienes viven en ellas.
En apenas 25 metros cuadrados, el promedio de tamaño, estas casas pequeñísimas tienen cocina, baño, estar y dormitorio. Gracias a muebles funcionales y una decisión profunda de deshacerse de los objetos que inundan el día a día de la vida en las ciudades, en ellas se guarda lo mínimo indispensable para una vida cómoda y más sencilla.
